Me habitas

Para Montserrat, Carmen y Florinda,que un día decidieron habitar mi serOLYMPUS DIGITAL CAMERA

Yo esperaba
yaciendo en ti,
la garganta azul,
el peso en vilo.
Vestida de hoja, sola,
te pintabas
en el vidrio de mi cara.
No veo tus ojos,
no lloro,
te sé.

No pienso nacerte así
en otra dimensión
para otro mundo.
La piel es una herida,
magia de ti.
Mi lágrima sin luz
es tu envoltura,
dulce y cruel,
como el adiós.

Vives en mí,
llenas la copa,
eres
el eilencio
y el sol se aluna,
te dispersa.

Te asientas en mi cara,
en mi no boca y en el aire de mi helar.
Eres paloma,
vuelas por mis dientes,
por mi ropa.
Te llamo.
Te quedas.
Eres monte
y me miras.
Mi hombro abraza
tu desnudez
las tardes sin abrigo. 

Resguardada del viento, te haces nueva,
presumes de caléndula encendida
y cantas. Te paseas esparcida
ceniza de tu mente y de tu cueva.

Mi mano te recoge y es la prueba,
tú sigues existiendo en mí prendida
y creces. Y mi frente te convida
y comes del amor que te comprueba.

Hermana, flor y pájaro y espuma
del aire de los montes y retama,
te siembro en mi calor, mi andar, mi bruma,
te busco por el alma que te llama
amiga de la tarde, sed que suma
mi sed en tu recuerdo y en tu cama.